miércoles, 22 de diciembre de 2010

EL AÑO PRÓXIMO ME VOY DE VENDIMIA

Mi intención en el día de hoy era daros un poquito de envidia, pero va a ser que no. Estamos en Squaw Valley, una de las mejores estaciones de esquí del mundo, con el Lago Tahoe en el horizonte y los bosques nevados pidiéndote a gritos que hagas slalom entre los árboles... Idílico, bucólico, eólico...No es que haga viento, pero acaba en lico y quedaba bien en la frase.
Las sensaciones que provoca el esquí, pocas cosas las ofrecen en la vida, salvo la vendimia. Vístete, abrígate que va a hacer frío. Aun no he desayunado y ya estoy sudando. Cuidado que resbalas en el hall. Lucio sujeta tus esquís. Martín le acabas de meter un bastón en el ojo a esa señora. ¿Dónde está el forfait?. No en el otro bolsillo; mierda se ha caído el guante. Papi llévame mis esquís. Ponte el casco, no quiero. Excuse me! Nos hacemos una foto. No, luego. ¿Y la cámara?; en el otro bolsillo, no en el de la chupa. I'm sorry. Papi, llévame a hombros. Pero quién dijo que iba a hacer frío, estoy chorreando. Lucio anda más deprisa; me aprietan las botas. Diego le has dado con la tabla al niño pelirrojo. Ya tengo agujetas y no he llegado a las pistas. ¿Tienen un profe para el peque?: no; pues me cago en su madre. Vamos Lucio, te enseñaré yo; pero si yo no quiero esquiar; pues esquías por mis huevos, sube al telecabina. Le importa sacar su bastón de mi orificio nasal, thanks a lot. Papi quítame las botas. No tengo más manos. Ring ring ring, suena el teléfono: ¿Qué tal chicos? fenomenal, calculo que en un par de horas estaremos esquiando. Papi, tengo hambre; one hot dog, please. Sí con ketchup, please. Empieza a nevar. Tengo ketchup en los guantes, la cámara, los esquís, el forfait. ¡Qué calor! ¿Te has echado crema? No, pero bastará con el ketchup. Apriétate las botas. Ya me aprietan bastante... Me voy al hotel. No aguanto más. No he esquiado nada pero he hecho ejercicio por un año.
Siempre he dicho que el esquí es un deporte curioso. Su mejor momento es cuando llegas al hotel y te quitas las botas. Es como aquel que se daba martillazos en un dedo porque le daba mucho gusto cuando paraba. A mi me encanta, ¿se nota, verdad? Va en serio, disfruto como un enano viendo la cara de felicidad de Montse y los niños cada vez que venimos a la nieve. Ellos esquían muy bien y lo pasan en grande. Yo soy su sherpa.

1 comentario:

  1. Mientras tu haces de Sherpa, Montse desafía las leyes físicas de la velocidad, Dieguillo me imagino que llevará el melón bien abrigado, a Martín cuidado con las preguntas que le puedan sugerir este viaje, y Lucio se da su Bautismo en la nieve; en España celebramos el día de la salud, a ver si te suena 63480, 50.000 euros... ponle tu la música. Oficialmente estamos en Navidad, FELICIDADES BLOGUEROS.

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