miércoles, 22 de junio de 2011

EUROPA Y AMÉRICA

Nuestro amigo Duncan se quiere venir a vivir a España. Está cautivado por las cosas buenas que le hemos contado de nuestro país y de la vieja Europa y ha decidido que ya es hora de dar un giro a sus vidas, romper con sus raíces americanas y saltar el charco. Nosotros le hemos contado que las cosas no están bien ahora en España para emigrar allí, aunque claro está que no es lo mismo ser un inmigrante sudamericano que un estadounidense. Todavía hay clases y razas.
Lo mismo pasa aquí, nosotros hemos sido siempre muy bien recibidos porque hablamos esa lengua latina que tanto les gusta pero además hemos venido en avión desde el viejo continente, sin pasar a escondidas la frontera mexicana. Ser español está muy bien visto en esta ciudad. De hecho los americanos siempre han tenido especial debilidad por lo europeo, les gusta viajar a Europa y los productos alemanes, franceses o italianos son aspiracionales. Tener una BMW o un Volkswagen es lo más cool y si ya te puedes dar el lujo de tener una Ducati o un Ferrari, ni te cuento. Por eso en este estado hay el mayor número de Ferraris por metro cuadrado.
Se meten con la vieja Europa cuando esta les cuestiona su política, pero en el fondo sienten un enorme respeto por nuestro continente y toda su historia y se deslumbran cuando ven o escuchan hablar de monumentos con muchos siglos de historia. Digamos que el americano puede ser chulo o prepotente pero no chauvinista, para eso ya están los franceses ¿no? A los españoles nos tienen como gente divertida y progresista. No es verdad ese tópico de que no saben dónde está España y los que no han estado ya, quieren hacerlo en breve.
Uno de los anuncios que más repiten en los descansos de los partidos de los Giants (llevamos cuatro derrotas seguidas) es de unas peluquerías y los protagonizan un padre y un hijo que van al peluquero y tras cortarse el pelo dicen: "Ya estamos listos para viajar a España" y a continuación se les ve corriendo un encierro de San Fermín. Todavía no he conseguido entender por qué conviene cortarse el pelo para correr delante del toro. Yo no pienso correr delante de ningún toro, pero eso sí me voy a cortar el pelo para volver a España por una cuestión estética y por ser bien recibido.
Duncan, si se decide a dar el salto, sería bien recibido pero no sé a qué podría dedicarse. Igual que en su día pensamos que sería bueno un restaurante de paellas en San Francisco, quizás no estaba mal uno de "Clam Chowder" (crema de berberechos) y crabs (centollos) en el centro de Madrid. Se llamaría Golden Gate, claro. Es verdad que la hostelería es muy esclava, pero él lleva muchos años trabajando por cuenta ajena, desde las ocho de la mañana a las ocho de la tarde y con sólo dos semanas de vacaciones al año. Es verdad que los sueldos son mejores aquí, pero la vida también es más cara. Bueno, que yo no pretendía hacer en una entrada toda una comparación de las cosas buenas y malas de cada continente; ese ha sido uno de los cometidos del blog durante todo el año y si ahora hubiese que sacar una conclusión, sería muy confusa. En algunas cosas son mejores ellos y en otras, nosotros y en ambos sitios estamos llenos de contradicciones. Ahora que lo conocemos, lo mejor será quedarse con lo bueno de cada país. Listo que soy ¿eh?

4 comentarios:

  1. Se te olvida entre las cosas buenas de ese lado del charco donde te encuentras mi adorado Ford Mustang, me quedé con las ganas de tenerlo, era mu caro. Eso si lo probé alquilado, negro y con toma de aire en el capó, no veas lo que mola. A cambio tuve mi Subaru Impreza que tampoco estaba mal. y lo flipaban cuando lo oían sonar y sobre todo cuando veían que tenia marchas manuales, te preguntaban ¿pero tu sabes conducir eso?, era divertido. Lo peor, el exceso de carnaza que me zampé en tantos meses, al fin y al cabo yo estaba como a 2000 kilómetros de la costa. Pero tienes razón, cada uno tiene lo suyo, y como siempre lo inteligente es quedarse con lo bueno, lastima que las cosas duran demasiado poco a veces. Animo que ya queda menos para aguantar de nuevo a la suegra, que ya está nerviosita perdida, pensando en si tenéis desayuno en la nevera.

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  2. Esperamos que no vuelvas muy abuelo cebolleta, (que ya con tu edad es muy facil) porque un año da para muchas batallitas.

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  3. "Nos unen nuestras diferencias y nos separan nuestras igualdades" no esmia la fgrase, ¡ojalá!, pero creo que puede servir.
    Me procupa seriamente cuantas cenas, con sus copas, nos costará que nos cuentes todas las anecdotas, dimes, diretes, amigos, secuencias y escenas vividas por los 6 durante todo el año ... nos pondremos como vacas-burras, pero si es por un amigo, ¡adelante!.
    Diego, no te cortes el pelo, corras o no corras San fermín, no te lo cortes, atrevete; si vienes tal y como te fuiste va a parecer que no te has ido (menuda gilipillez, si, si, gilipillez, no llega ni a gilipollez)
    Bueno, lo dejo, hoy no es mi día ...pero OS ECHOOOO
    DE MENOOOOOOOOOOOOOOOOOOSSSSSSSSSSSSS

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  4. Cuando lleguemos no vamos a poder hacer de abuelos cebolleta porque ya lo sabéis casi todo a través del blog.
    Sobre la seguridad en la ciudad yo siempre he tenido una sensación de gran seguridad. Algunos días la puerta de la casa la hemos dejado abierta para que Simón y Diego pudieran entrar y salir, hasta se nos olvida cerrar la llave muchos días por la noche y nunca ha pasado nada. Claro que en Madrid me dejo la llave puesta por fuera muchos días.....hasta que viene el vigilante del vecino de las estatuas a regañarme.....

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